La educación a distancia requiere desarrollar muchas habilidades valiosas, entre la que encontramos la gestión del tiempo. La cual nos ayudará a repartir de manera adecuada nuestra carga académica, evitando el estrés, promoviendo nuestra salud y ayudándonos a ser efectivos. Pero, ¿Cómo distribuir tus horas de estudio? A continuación, te lo contamos.
¿Cómo distribuir tus horas de estudio?
Lo más importante que debemos tomar en cuenta, es que no sólo estamos gestionando nuestras actividades académicas, también todas nuestras actividades adyacentes. De la misma manera, es fundamental incluir descansos, dar prioridad a las materias difíciles y combinar temas, evitando así la monotonía y el cansancio. Además, tener un espacio tranquilo y libre de distracciones será clave para nuestro éxito, maximizando nuestra concentración para alcanzar nuestras metas.
El primer paso
Debemos comenzar con la planificación, creando un calendario o agenda para visualizar nuestras tareas, fechas límites, objetivos a corto, mediano y largo plazo. Es importante dividirlo en bloques de tiempo, lo que hará más sencilla la organización e incluir pausas activas y otras actividades en nuestro día a día. Aquí es importante identificar cuáles son las tareas más importantes o difíciles, para abordarlas primero. Un detalle que no podemos pasar por alto, es crear una rutina, intentando estudiar a la misma hora, en un lugar tranquilo y ordenado.
¿Cómo hacerlo?
Podemos crear dicho calendario de manera manual o apoyarnos en alguna aplicación digital de gestión de tiempo. También podemos elegir diversas herramientas y técnicas de estudio para entrelazar el estudio con los descansos. La clave para la planificación es la flexibilidad, la constancia y el equilibrio entre el estudio y el ocio, evitando así el agotamiento y maximizando la concentración.
Repartiendo el tiempo
En la técnica Pomodoro, por ejemplo, se alternan 25 minutos de estudio intenso, seguidos de 5 minutos de descanso, lo que resulta ideal para tareas difíciles. También puedes añadir bloques de 50 minutos por 10 minutos de descanso, sobre todo en materias difíciles o temas que necesitan especial atención. La flexibilidad es clave, tanto como el alternar materias, ya que, si nos centramos en su sólo tema por mucho tiempo, podemos estresarnos. Distribuye los bloques y su duración como te convenga, realizando ajustes cuando sea necesario.
Recomendaciones
- Recuerda incluir descansos y pausas activas, fundamentales para evitar el agotamiento y el estrés
- Varia las actividades, incluyendo resolución de ejercicios, análisis de temas, lecturas y práctica de vocabulario
- Revisa y ajusta tus horarios semanalmente, siendo flexible y realista con tus posibilidades
- Realiza un repaso breve antes de dormir, lo que ayudará a fijar mejor la información en tu memoria
- Algunas herramientas recomendadas en las que te puedes ayudar son: Google Calendar, Trello, Forest, Airtable, entre muchas otras.
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